miércoles, 2 de noviembre de 2011

De qué hablo cuando hablo de correr

Haruki Murakami se ha convertido en uno de los escritores japoneses más importantes que existen en la actualidad y es uno de mis escritores de cabecera. Su estilo inconfundible combina la prosa bien cuidada con el simbolismo de sus historias, en las que suelen aparecer personajes solitarios y melancólicos, a los que casi siempre me apetece abrazar por la ternura que me transmiten. 


Aunque en su libro, "De qué hablo cuando hablo de correr", Murakami no cuenta la vida de ningún personaje, sino que reflexiona sobre el placer de correr. En este ensayo, el aclamado escritor habla sobre su experiencia en maratones y ultra-maratones, y nos cuenta  lo que significa para él levantarse cada mañana (llueva o haga sol) para entrenarse. Murakami habla también de cómo llegó a escribir por primera vez y de cómo se fue dedicando cada vez más a la escritura, permitiéndonos entrar en sus comienzos de un modo directo y honesto.

Ciertamente, creo que el libro no está del todo bien escrito, o puede que sea yo quien me haya vuelto exigente con Murakami o esté poco acostumbrado a leer ensayos, pero creo que podrían pulirse algunos detalles de "estilo". Reconozco también que el hecho de que esté escrito a modo de diario, ha podido dificultar mi lectura, pero aún así ha sido un libro muy rápido de leer y se disfruta con mucho gusto. Porque es una lectura diferente que nos lleva "más allá" de la propia vida y nos mete en la mente del escritor. Así que lo recomendaría para quienes tengan ganas de buscar un "libro de paso" entre dos historias, o para quienes quiera pasar un rato entretenido reflexionando sobre el propio límite del cuerpo humano. Creo que este libro "oxigena" y nos invita a pensar sobre qué significa para cada uno de nosotros, "la superación".

Por cierto. El título hace referencia a una novela de Raymond Carver, "De qué hablo cuando hablo de amor".  Mi amor por Carver ha quedado de manifiesto en muchas ocasiones, y quisiera decir que Murakami se siente influido por Carver, al que ha traducido del inglés al japonés en numerosas ocasiones. 

No hay comentarios: